Por si alguien ha quedado para ver esta película ahora, llega tarde a la cita y ha tenido la brillante idea de pasarse por la web para ver su valoración pero solo le da tiempo a leer las primeras líneas: NO LA VEA. Avisado está.
Para resumirla voy a permitirme la licencia de tomar una frase de Maka, que temo pueda hacerse habitual, la película no termina de empezar. Buscas un agujero en el fondo del vaso de tu refresco. –¿Bebo más rápido de lo normal o es que la peli es muy lenta?- Te preguntas. El reloj del salvapantallas del móvil te confirma que no le pasa nada a tu sed y con la sensación de haberte comido las palomitas en los créditos iniciales se encienden las luces del cine y con incredulidad miras al de la butaca de al lado, no sabes si alegrarte porque ya ha acabado todo o llorar pensando en el dinero de la entrada malgastado en esta peli en 2,5D (a veces pilla un pico de 3D).
“Está usted en el confesionario, confiésese después de oir la señal... ¡Pii!” – No padre, si yo venía a darme de baja… Y es que estamos en el siglo no sé cuánto, la iglesia lo domina todo de manera autoritaria después de largo tiempo de guerra contra los vampiros, que son por supuesto superiores a los hombres o al menos que los hombres corrientes. De manera que para poder alzarse con la victoria necesitan echar mano de su unidad de combate especial: los sacerdotes. Estos son una especie de Jet Li cazavampiros, pero tiran más dados en ataque. Una vez erradicados los vampiros y destruidas sus colmenas pues… los sacerdotes se quedan sin faena y con mucho poder como para mantenerlos juntos, así que las unidades son disueltas y ellos marginados (tienen una cruz tatuada en la cara).
Destripe:
El rapto de una joven en un poblado de las afueras, con la sospecha de que hayan sido vampiros, pone en marcha al protagonista después de que la iglesia le prohibiera cualquier movimiento, puesto que los vampiros fueron exterminados y no hay más que hablar. Así que el “sicario de dios”, con orden de busca y captura ya que “el que va en contra de la iglesia va en contra de dios”, marcha a la aventura acompañado por el novio de la joven secuestrada.
Resulta que los vampiros no estaban muertos ni estaban de parranda, estaban preparando su vuelta, y ahora cuentan con una nueva arma: el antiguo compañero del prota que desapareció cuando mataban a los chupasangres de la última colmena y al que la reina vampira convirtió en algo nunca visto, un híbrido entre sacerdote y vampiro (una mezcla de Blade y Van Hellsing). Solo me falta decir que la joven es la hija del prota (ella no lo sabe pero el malo sí, claro) y que el “sicario” es perseguido por sus antiguos compañeros de unidad para darle caza. Y ya he destripado toda la película.
Estoy leyendo lo que llevo escrito y la película parece hasta interesante, pero no. En mi opinión está muy poco trabajada. Quizás con un argumento igual o parecido podría llegar a sacarse algo más, pero los pocos detalles del film son solo para empeorarlo. No tiene mucha acción y la que hay va a juego con el conjunto, pobre y difícil de tragar. Las actuaciones son difíciles de valorar porque, repito, no puedes creerte lo que estas viendo. La película es un intento de algo, un intento fallido.
Hombre Rocky, ¡Bienvenido a nuestro blog y cada día el de más gente!
ResponderEliminarThe Fantastic Murz.
ResponderEliminarUna peli menos para ver.