Era un caluroso y aburrido día de 3 de julio, un domingo como otro cualquiera (las playas abarrotadas de gente, atascos en las carreteras y las canciones de Pitbull que ya han sustituido a las Jordi Dann), cuando uno de los nuestros propuso la gran idea de ir al cine.
Curiosamente después de un mes de noticias trepidantes y algunos largometrajes que se esperan con rigurosa ansiedad (El árbol de la vida, Super8, o incluso Django y The dark knight rises, etc.), decidimos ir al cine. Con una cartelera poco prometedora, todo hay que decirlo, al final nos decantamos por X-men: primera generación, y puesto que en los cines Orion de Santa Pola ya no estaba en cartelera, escogimos hacer una pequeña escapada a los cines “Yelmo Cineplex” del centro comercial “Puerta De Alicante” ,que por supuesto, está en Alicante para nuestros seguidores más cortos.
Si hay que decir algo de los cines yelmo, o de este en particular, es que los reposabrazos son de plástico duro (un poco incómodos), y que la publicidad del propio yelmo es asqueante con respecto a otros cines. La entrada resulta más cara en la ciudad de la que venimos (Elche), que incluso con el descuento no compensa su precio. Otra cosa que resaltar es que las películas en 3D te cobran 2 suplementos en lugar de darte el precio completo (para intentar justificar el precio). Por lo demás, todo bien y además tiene muchas salas. Si algo hay que decir en su defensa, es que hay una buena acústica y la pantalla se ve bastante bien. Lo cierto es que a pesar de todo existe un buen ambiente. Es el típico cine al que te gustaba ir cuando tenías 7 años por el aire fantasioso que se respira allí dentro.
Antes de partir, como ya es habitual, quedamos para planear la jugada. Alguno no estaba especialmente convencido de verla, pero al final nadie puso ninguna objeción, puesto que la crítica se había portado bastante bien con esta entrega y el marketing que le había hecho Jesús justificaban al 100 por cien esta escapada.
Una vez en el centro comercial, decidimos cenar en el Mcdonald’s (al que personalmente tengo aborrecido). Allí zampamos bien deprisa porque la película estaba a punto de empezar y corríamos el riesgo de perdernos los trailers, que por cierto, no eran del todo novedosos puesto que la película hacía tiempo que la habían puesto. Repetía 'Bad Teacher' en la que se ve a una Cameron Diaz un tanto entrada en años, pero si uno destacó especialmente fue el trailer de 'Transformers: El lado oscuro de la luna' que esta vez nos sorprende con unos efectos especiales que son tremendamente realistas que sin duda, despiertan tu olvidado interés por esta saga en la que recordemos, ya no sale Megan Fox.
Va a comenzar la película, la gente deja sus conversaciones vacías a cerca del tiempo y los típicos cotilleos, y es entonces cuando empieza el origen de una de las grandes sagas de Marvel que inunda la gran pantalla.
Fin de la película. Las expectativas estaban dudosas, pero el resultado es más que prometedor. Después de esperar 8 o 9 minutos al acabar la película, te das cuenta de que ésta vez Marvel no nos ha obsequiado con sus 50 o 60 segundos de metraje extra con el que nos solía conquistar. Así que no esperéis al final de la película porque ya os adelantamos que no aparece nada.
El comentario de David esta vez iba referido al mutante que emitía ultrasonidos por la boca que sugería algo parecido a esto: “Al tío ese que chillaba ya lo podían haber matado, madre mía que mierda de superpoder". Jesús dijo que el español del que tanto habíamos oído hablar no abre la boca en todo el metraje. Yo estoy de acuerdo en estas afirmaciones y añado que ésta sin duda es una de las mejores entregas de X-Men, o como diría David, X-Fuet. La sorpresa de muchos fue la inesperada aparición de Hugh Jackman que aunque fue muy corta, causó un furor desmesurado entre las butacas del cine.
El trayecto de vuelta fue un apasionado debate sobre superpoderes en el que se ponía sobre la mesa la utilidad de cada uno de ellos. Al final la cosa quedó en que los mejores son los de volar, controlar y leer la mente (que solo puede ser utilizado para fines malvados), el de transformarse en cualquier persona y el de hacerse invisible (también con fines malvados).
Para finalizar solo adelantaros que la crítica de 'X-men: primera generación' la hará nuestro compañero Jesús
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