Lo primero que nos viene a la cabeza cuando oímos El Padrino 3 es "menudo truño". Claro, claro, El Padrino, y tararean un trocito del tema principal compuesto por Nino Rota. Parece ser que todo el mundo ha visto la trilogía de El Padrino, ha leído el Qujote y un grupo de guiris le chilló desde su balcón fucking, fucking. En la mayoría de los casos es todo mentira y sólo recitan un montón de clichés que alguna vez escucharon al amigo de un primo suyo cuando la calificó como estiercol de búfalo. A veces es una verdad a medias y es que la han visto pero no entera, ¿cómo se puede criticar una película sin terminarla? y encima van de listos. Muchas veces he escuchado grandes mierdas acerca de películas masacradas por la crítica y luego resulta que la auténtica mierda era la película serbo-croata que ponían por las nubes. Lo mejor es siempre opinar por uno mismo.
La pelicula dura bastante, así que verla después de comer no es buena idea, hay que buscar un momento idóneo. El principal lastre de esta tercera parte son sus predecesoras, grandes obras que desmienten el dicho de segundas partes nunca fueron buenas, aunque por un estecho margen prefiero la primera parte a su secuela y es que la sombra de la figura de Don Vito es larga y espesa.